por Rafa Benitez.
Sobre cuándo comenzar la iniciación deportiva hay muchas
teorías. Nosotros hemos resumido estas diversas ideas en dos muy concretas. Hay
unos autores que hablan de iniciación deportiva desde la infancia y otros que
hablan de iniciación deportiva alrededor de los 10 años.
Aunque parecen teorías muy dispares, analizándolas en profundidad llegamos a la conclusión de que no lo son tanto, ya que su diferencia es tan sólo de terminología. Los autores que hablan de iniciación deportiva desde la infancia se refieren a un trabajo general sobre el niño orientado hacia una futura actividad deportiva; los que hablan de iniciación a los 10 años aproximadamente, se refieren a trabajo concreto y específico hacia un deporte dado; así, éstos no están en desacuerdo con trabajar con el niño de forma general hasta los 10 años y entonces empezar a hacerlo de forma más específica.
Iniciación deportiva desde la infancia.
En el prólogo a la edición española del libro de Liselott Diem, Deporte desde la infancia (1), José María Cagigal, dice: "El hombre será en definitiva lo que haya sido su infancia".
Según él, el individuo, la persona, se constituye en la infancia, de ahí que la evolución que se da en los primeros años de vida tenga una gran importancia. Esto es válido también para la evolución deportiva, ya que la considera más como un enriquecimiento de la persona por el movimiento que como una adaptación técnica y física a la práctica de un deporte.
En los primeros años (0 a
3 años) el movimiento es fundamental, ya que gracias a él el niño desarrolla su
facultad de observación, su creatividad, su capacidad de coordinación y de este
modo su sentido del equilibrio, del espacio y del tiempo.
De3 a 6
años, el aprendizaje deportivo se realiza en los siguientes pasos didácticos
según Liselott Diem:
1. Se crea la situación y el estímulo adecuados.
2. Se plantea el problema y cada individuo intenta resolverlo: actuación de "prueba y ensayo".
3. Se repiten, se comparan y se juzga la solución hallada: fase de "comprensión".
4. Variación individual de las formas básicas: fase "creativa".
5. Se dificultan los ejercicios y el sujeto trata de emular sus propias realizaciones y las de los demás: conocimiento del nivel real de aspiración.
Liselott Diem propone para mejorar la habilidad corporal gran variedad de estímulos y ejercicios.
De6 a 10
años es la edad considerada por estos autores como la más apta para adquirir
habilidades corporales y el desarrollo de esas habilidades se realiza mucho más
a través de la práctica de las diferentes especialidades deportivas.
Los deportes-juegos son otra forma de desarrollar la capacidad motriz.
En esta edad se trata, sobre todo, de que el niño sea capaz, no sólo de reaccionar correctamente, sino también de aplicar conscientemente las técnicas oportunas.
Aunque parecen teorías muy dispares, analizándolas en profundidad llegamos a la conclusión de que no lo son tanto, ya que su diferencia es tan sólo de terminología. Los autores que hablan de iniciación deportiva desde la infancia se refieren a un trabajo general sobre el niño orientado hacia una futura actividad deportiva; los que hablan de iniciación a los 10 años aproximadamente, se refieren a trabajo concreto y específico hacia un deporte dado; así, éstos no están en desacuerdo con trabajar con el niño de forma general hasta los 10 años y entonces empezar a hacerlo de forma más específica.
Iniciación deportiva desde la infancia.
En el prólogo a la edición española del libro de Liselott Diem, Deporte desde la infancia (1), José María Cagigal, dice: "El hombre será en definitiva lo que haya sido su infancia".
Según él, el individuo, la persona, se constituye en la infancia, de ahí que la evolución que se da en los primeros años de vida tenga una gran importancia. Esto es válido también para la evolución deportiva, ya que la considera más como un enriquecimiento de la persona por el movimiento que como una adaptación técnica y física a la práctica de un deporte.
En los primeros años (
De
1. Se crea la situación y el estímulo adecuados.
2. Se plantea el problema y cada individuo intenta resolverlo: actuación de "prueba y ensayo".
3. Se repiten, se comparan y se juzga la solución hallada: fase de "comprensión".
4. Variación individual de las formas básicas: fase "creativa".
5. Se dificultan los ejercicios y el sujeto trata de emular sus propias realizaciones y las de los demás: conocimiento del nivel real de aspiración.
Liselott Diem propone para mejorar la habilidad corporal gran variedad de estímulos y ejercicios.
De
Los deportes-juegos son otra forma de desarrollar la capacidad motriz.
En esta edad se trata, sobre todo, de que el niño sea capaz, no sólo de reaccionar correctamente, sino también de aplicar conscientemente las técnicas oportunas.
Iniciación al fútbol
Para conocer el momento adecuado para la iniciación específica al fútbol, creemos que se deben conocer algunos rasgos de los niños en las distintas edades (2):
7 años.
El niño de 7 años puede tener "períodos" en que sólo se dedica a un tipo de actividad; luego puede abandonarla repentinamente por otra.
Cuando se le pide que haga algo se fatiga rápidamente.
8 años.
Muestra mayor disposición que el niño de 7 años hacia el aprendizaje de técnicas nuevas.
Tanto los varones como las niñas gozan con el fútbol.
Sus intereses son de duración breve y pasa rápidamente de una cosa a otra.
Toda sesión de juegos sin supervisión termina con frecuencia en discusiones.
9 años.
Al niño de 9 años le complace poner a prueba su habilidad. Si algo le gusta puede perseverar hasta dominarlo.
Tiene gran curiosidad por aprender y le gusta exhibir las habilidades que aprende.
10 años.
El niño de 10 años experimenta placer en la simple actividad física.
Le gusta pertenecer a clubes y asociaciones colectivas.
Es la edad de la culminación de las habilidades manipulativas.
Hacia los 9 ó 10 años se le despierta al niño el interés por hacer sus movimientos eficaces y por intentar llegar a unos niveles concretos de rendimiento.
Numerosos psicólogos han coincidido en que la edad ideal para iniciar el aprendizaje motor debe ser aquella en la cual no exista "crisis", tanto del crecimiento fisiológico como del desarrollo psicológico.
Nicola Comuci (3), considera los 10 años como edad ideal, porque a esta edad el joven ha terminado ya un ciclo evolutivo. Este período corresponde a la fase de formación muscular que sigue al alargamiento de los huesos, característico de la primera pubertad.
Después de este breve estudio, es obvio que la edad más adecuada para la iniciación al fútbol oscila entre los 9 y 10 años, porque el niño reúne muchas cualidades que le permiten asimilar las habilidades futbolísticas con mayor facilidad.
Pero si yo enseño a un niño a jugar a los 7 años y trabajo con él desde esa edad, ¿no será mucho mejor a los 12 que otro que haya empezado a los 10?.
Para contestar a esta pregunta debemos conocer los experimentos llevados a cabo por Dusenberry (4), de los que se puede deducir que el tiempo empleado en el ejercicio puede resultar perdido si se hace a una edad inapropiada (hizo dos grupos de niños de
Por otra parte, el trabajo de iniciación al fútbol implica unas exigencias en cuanto a dimensiones de campos, porterías, tamaño y material del balón, etc., que van en función de la edad del niño y de su constitución; si empezásemos a los 7 años, estos aspectos deberían volverse a estudiar, ya que de no hacerlo así se podrían crear multitud de vicios o defectos técnicos debidos a la no adaptación fisiológica del niño al material (por ejemplo, si el balón es muy pesado, cuando golpee lo hará con la puntera, porque de otra forma no podría con el balón y este defecto puede influir más adelante en su técnica de golpeo).
De una forma general, el trabajo a realizar en la etapa de iniciación al fútbol puede muy bien consistir en lo que nos recomienda Felipe Gayoso (5):
Trabajo físico: coordinación, esquema corporal, percepción temporal, percepción y estructuración espacial.
Trabajo técnico: (método global) parada con la suela, semiparada con el interior y con la suela, amortiguamiento con el interior y con el empeine, conducciones con el interior y con el exterior, golpeos con el interior y con el empeine, golpeos con la cabeza.
Una forma de que los niños aprendan sin aburrirse son los juegos, el fútbol con equipos de 5 jugadores es un juego muy adecuado para esta fase de iniciación.
- La conclusión definitiva es que debemos favorecer todo lo que sea movimiento en el niño desde su nacimiento, para irlo preparando para su "verdadera" iniciación al fútbol que se llevará a cabo entre los 9 y 10' años en los centros adecuados.
(1) Liselottt Diem: Deporte desde la infancia. Ed. Miñón. Colección Kiné.
(2) Sacado de: El niño de 7 y 8 años,, El niño de 9 y 10- años, de Arnold Gesell y otros. Ed. Paidos.
(3) Comuci, Nicola. Italia. Enseñanza de base a los niños entre los 10 y 14 años. N., 2 de la revista: El Entrenador español de Fútbol. Octubre, 1979.
(4) Sacado del libro: La habilidad en el deporte, de Bárbara Knapp. Ed. Miñón. Colección Kiné.
(5) Felipe Gayoso. Iniciación al fútbol (8-14 años). Tesina fin de carrera INEF de Madrid.
Autor: Rafael Benítez Maudes y Emilio Córdoba Astillero, Licenciados en Educación Física y Entrenadores de Fútbol. Revista: “El Entrenador Español de Fútbol, 2ª Época, num. 13., Julio 1982.
“Si hacemos un gol no hay plan B, hay plan A2... y es
seguir presionando”.
Gerardo “Tata” Martino.
Óscar Méndez Albano.