Author: Oscar Mendez.
Los datos demuestran que no es un equipo tan contragolpeador y sí basa su juego en jugadas muy elaboradas
Esto no es nada
habitual en el líder de LaLiga, acostumbrado a lo contrario. En lo que va de
campeonato la tónica habitual es ver a más de la mitad del equipo por delante
del centro del campo. Por ejemplo, si lo comparamos con el día del Betis, por
elegir un rival comparable en nivel al Atlético, vemos la diferencia. No solo
fue mucho más profundo (alargado, para entenderse), sino también mucho más
amplio (más ancho).
Podemos decir que los blancos, pese a la entidad del rival (y las dificultades propias de ese partido) jugaba en casa y eso invita a ser más valiente. Por eso elegimos también un encuentro disputado lejos del Bernabéu este curso y en el que le costó mucho sacarlo adelante: el del Espanyol.
Pese a pasar
apuros y estar algo menos profundo y amplio que ante el Betis, los de Ancelotti
siguieron esa tónica de equipo dominador.
Por lo tanto,
sí, en el derbi se confirma que el Madrid se encerró más de lo habitual.
Simeone también
tiene razón si atendemos al tiempo de juego de los blancos en cada tercio del
campo. Apenas pasaron un 16% en el tercio ofensivo y un 30% en el defensivo, lo
que corrobora que en el Metropolitano estuvieron metidos muy atrás.
Nada que ver
con lo de los partidos anteriores. Hasta ahora el partido ante el Celta había
sido el de menos presencia en el tercio ofensivo, con un 25%.
Hasta aquí todo
confirma lo que explicó Simeone en rueda de prensa. Pero, ¿es la realidad
actual del Madrid? ¿De verdad su juego está basado únicamente en esperar atrás
y salir a la contra? Los datos más bien dicen que es lo contrario
Secuencia de
pases
La realidad es
que el Real Madrid es el equipo de LaLiga con el juego menos directo. Según
datos de Opta, es el que más pases hace por secuencia, con 4,73 (muy por encima
del resto) y cuyas secuencias duran más tiempo, con una media de 12,9 segundos.
En cambio, es el tercer equipo que menos rápido progresa con el balón tras
Celta y Barcelona. Todo esto lleva a ser el equipo de LaLiga con el estilo de
juego más madurado e intrincado, como podemos ver en el siguiente gráfico.
A todo esto se
añade que es el segundo que más secuencias realiza de más de 10 pases, con 93,
de las cuales 20 acaban en disparo o en al menos un toque dentro del área. En
ambas solo le supera el Barça, con 102 y 34, respectivamente.
El poderío
blanco también se puede ver por zonas del campo. En este gráfico queda claro
que no es un equipo que se deje dominar. Las zonas azules son en las que abarca
al menos el 55% de los toques. Las rojas donde son los rivales quienes superan
ese 55%. Y las grises donde están igualados. Hay mucha más presencia azul.
La inclinación del campo
Otro aspecto
que denota lo poco habitual que es ver al Madrid agazapado para salir al
contraataque nos lo dice la inclinación del campo, un concepto que sirve para
ver la frecuencia con la que un equipo pudo tomar la iniciativa de ataque,
obteniendo su porcentaje de posesión basado en los toques o pases en el tercio
atacante.
En este
sentido, en el acumulado de la temporada solo el Barcelona (74%) inclina más el
campo que los blancos (64%). Esto explica lo dominante que es en la zona
decisiva del terreno de juego.
Los dos goles
del derbi
A la hora de
elaborar los goles también el Madrid los ha hecho en jugadas combinatorias. Aún
tenemos en la retina los de Vinicius y Hazard en Celtic Park. Pero incluso en
el derbi, en ese partido en el que estuvo encerrado y supuestamente saliendo a
la contra, el Madrid supo construir dos goles elaborados.
El de Rodrygo
no llegó a la categoría de los logrados en Escocia, pero no desmerece nada. Un
jugada que se inicia en Courtois y que terminó con el sensacional pase de
Tchouaméni al brasileño. Entre medias, una combinación de pases que arrancan en
Courtois, pasan por Kroos, Militao, el propio Tchouaméni y Valverde, que hace
una larga conducción, Mendy, Rodrygo, de nuevo Tchouaméni ,y finalmente, el gol
También el de
Valverde vino de una larga jugada que se inició en un saque de puerta que puso
en juego Militao a Courtois, que pasó por la banda derecha con Modric, Carvajal
y el propio Valverde, que se fue a la izquierda y, allí, llegó la combinación
entre Rodrygo, Modric y Vinicius antes de que la finalizara el uruguayo.
Por lo tanto,
la sensación que tiene Simeone sobre el juego del Real Madrid es más eso, una
sensación que una realidad. Esto no quiere decir que el conjunto blanco no
utilice como recurso el salir a la contra. Ni mucho menos. No en vano es el
equipo de LaLiga que más pases en profundidad completa por 90', con 3,83,
entendido como pases lanzados a la espalda de la línea defensiva hacia el
desmarque de un compañero que lo recibe, lo que lleva a pensar que sí utiliza
el recurso del contragolpe. Pero lo que queda claro es que es un recurso más
del estilo de juego del Madrid y no el único ni el principal.
* Datos de Opta
Stats Perform y Soccerment
Dada la importancia e influencia que este entrenador ha
tenido en el fútbol moderno, especialmente sobre Ralf Rangnick (Padre de la Escuela Alemana
de Gegenpressing) decidimos publicar una nota de otra página que nos gustó mucho y recomendamos donde el enlace es el
siguiente:
http://www.culturaredonda.com.ar/valeriy-lobanovskyi-un-adelantado-a-su-epoca/
Cuando se quiere explicar lo que fue el fútbol en la Unión
Soviética, es imposible omitir la figura de Valeriy Lobanovskyi. Nacido en Kiev
el 6 de enero de 1939, este prestigioso director técnico llevó al Dínamo de la
capital ucraniana a ser el equipo más ganador de una liga históricamente
dominada por los clubes rusos. Con tres etapas tanto en los Blanquiazules como
en la selección de la URSS, el Coronel dirigió a los futbolistas soviéticos más
reconocidos y estuvo presente en los Mundiales de 1986 y 1990.
Su debut como entrenador fue en Dnipro Dnipropetrovsk con 30
años y, cuatro temporadas después, asumió en Dínamo Kiev. En esta primera etapa
(1973-1982), ganó cinco veces la Soviet Top League, tres veces la Copa
doméstica, una vez la Supercopa soviética y, en 1975, obtuvo tanto la Recopa
como la Supercopa de la UEFA. Mientras tanto, entrenó a la selección en los
Juegos Olímpicos de Montreal 1976, donde superó por 2-0 a Brasil para conseguir
la medalla de bronce y completar un podio socialista con la República
Democrática Alemana (oro) y Polonia (plata).
Los Bilo-Syni de finales de los 70’ y principios de los 80’,
con un entrenador que priorizaba lo colectivo sobre lo individual, fueron uno
de los equipos más vistosos del Este europeo. Entre los jugadores más
destacados se encontraban el goleador Oleg Blokhin (Balón de Oro en 1975), Igor
Belanov (beneficiado en 1986 porque France Football solo premiaba futbolistas
europeos en ese momento), Oleksandr Zavarov, Vasyl Rats, Sergei Baltacha y
Pavel Yakovenko.
Valeriy Lobanovskyi consideró que tenía que hacer algo distinto en su carrera y renunció al seleccionado para vivir una experiencia particular. Se mudó a Emiratos Árabes Unidos y aceptó la oferta de la Federación de ese país para entrenar al combinado nacional. Allí dejó un grato recuerdo, al terminar la Copa Asia 1992 en el cuarto puesto (mejor clasificación histórica hasta ese momento). Sin embargo, en conflicto con los dirigentes se fue a Kuwait, donde entrenó entre 1993 y 1996.
Con la independencia ucraniana, Dínamo Kiev seguía ganando
todo a nivel local pero no conseguía resultados en las competencias
internacionales. El Coronel regresó al inicio de 1997 y, en su primer semestre,
salió campeón liguero con 11 puntos de distancia sobre Shakhtar Donetsk. En la
siguiente temporada, superó la ronda previa de la Champions League y logró dos
memorables triunfos contra Barcelona en fase de grupos. El primero, 3-0 ante
100.000 personas en el Olímpico de Kiev; el segundo, 4-0 en el Camp Nou. Un
Andriy Shevchenko de 21 años se dio a conocer al mundo anotando un hat-trick en
el primer tiempo, mientras que su acompañante en la delantera Sergiy Rebrov
amplió en el segundo tiempo. Así como esa noche catapultó a estos jóvenes
atacantes a ligas más importantes del Viejo Continente, el arquero portugués
Vitor Baía vio finalizada su carrera en el Barça. Esta participación culminaría
en cuartos de final: luego del 1-1 en Torino, Juventus venció 4-1 en Kiev con
un triplete de Filippo Inzaghi, quien luego terminaría siendo el socio de Sheva
en Milan. Casualmente, Barcelona y Juventus son dos de los rivales de los
Bilo-Syni en la Champions actual. ¿El restante? Ferencvaros de Hungría,
entrenado por Rebrov.
El primer ataque cardíaco sufrido por el matemático fue en 1988 y muchos se sorprendieron por su aspecto desmejorado cuando regresó de su experiencia en Medio Oriente. Semanas después del repechaje ante Alemania, sufrió otro infarto que requirió cirugía. De este modo, se le prohibió viajar en avión y se ausentó cada vez que Dínamo jugó de visitante en esa Champions League. El 7 de mayo de 2002, se desmayó durante el partido que su equipo jugó de visitante ante Metalurg Zaporizhzhya y volvió a infartarse camino al hospital. Falleció el 13 de mayo en el hospital de Zaporizhzhya y se dice que a su funeral asistieron alrededor de 150.000 personas, desde el Presidente de Ucrania -quien le otorgó la orden póstuma de Héroe Nacional- y muchos jugadores que dirigió -como Belanov, Rebrov, Blokhin y Shevchenko- hasta diversas personalidades de su país.
Cuando Milan ganó la UCL en 2003, Sheva dejó su medalla de
oro en la tumba del Coronel. En su honor, el estadio de Dínamo -usado
principalmente en el torneo local- pasó a llamarse Stadion Dynamo Valeriy
Lobanovskyi (en citas internacionales aún utiliza el Olímpico).
La carrera de Graham Potter bien podría ser de Football
Manager. A sus 35 años y sin haber entrenado en Inglaterra, recibió un llamado
de Östersunds de la cuarta división sueca a fines de 2010. Allí firmó un
contrato de tres años que, ascenso tras ascenso, fue renovando hasta asentar al
equipo en la Allsvenskan, la primera división. El reconocimiento internacional
lo encontró a principios de 2018, cuando alcanzó los dieciseisavos de final de
la Europa League.
En su primera temporada, se consagró campeón de la Division
2 Norrland -el grupo del norte de la cuarta división de Suecia-, mientras que
en 2012 logró su segundo ascenso consecutivo al ganar la Division 1 (tercera
categoría). Después de mantener al equipo en la Superettan -segunda división-
en 2013 (en el país nórdico la temporada futbolística equivale al año
calendario) y sintiéndose cómodo en el pueblo de 50.000 habitantes, Potter
renovó su contrato por tres aL Lños más.
Con el subcampeonato de 2015, Östersunds ascendió a la
Allsvenskan por primera vez en su corta historia (22 años). Ya en la máxima
categoría, el equipo de presupuesto más bajo, al que muchos daban como el
principal candidato al descenso, sorprendió por su fútbol asociativo y terminó
la temporada en una meritoria octava colocación. Además, Graham Potter fue
galardonado como el mejor entrenador del país en 2016.
El título más importante de su historia fue en abril de
2017, cuando se quedó con la Copa doméstica al vencer a Norrköping por 4-1 en
la final. Esto le valió la clasificación a la segunda ronda clasificatoria de
la UEFA Europa League, en la que eliminaron a Galatasaray. En el play-off
superaron a PAOK de Grecia, gracias a la regla del gol de visitante, y en el
Grupo J quedaron segundos detrás de Athletic Bilbao por los resultados entre
sí. A fin de año, el inglés repitió la distinción individual de la temporada
previa.
El cénit del Östersunds de Potter fue el jueves 22 de
febrero de 2018, en el Emirates Stadium de Londres. Una semana antes había
perdido 3-0 de local contra Arsenal por la ida de los 16vos de final, pero en
la vuelta los suecos sorprendieron y ganaron 2-1 como visitantes. Si bien este
resultado no alcanzó para evitar la eliminación, el partido resultó ser el
triunfo del equipo de una ciudad con menos habitantes que la capacidad del
estadio de Arsenal y que fue fundado un mes después de la asunción de Arsène
Wenger -en ese momento todavía estaba- como entrenador gunner. El segundo gol
de Östersunds lo anotó Ken Sema, uno de los futbolistas más importantes del
club escandinavo, que ahora juega en Watford, el mismo equipo contra el que
debutó el Brighton de Potter.
Recientemente descendido de la Premier League a la
Championship, Swansea City lo fue a buscar para entrenarlo en la segunda
división inglesa. Después de siete años y medio en Suecia, Graham Potter se
mudó a Gales en junio de 2018. Al arribar manifestó: “No por algo este club
jugó las últimas siete temporadas en la Premier League. Hay que devolverlo a
esa liga, pero no de cualquier manera. Debemos construir una identidad de juego
y saber qué queremos lograr”. En cuanto a los números, el año de los Cisnes fue
algo irregular, finalizando la Championship en la décima posición a pesar de
una racha de victorias en las últimas fechas. La mejor versión del equipo se
vio en la FA Cup, en la que alcanzaron los cuartos de final, cayendo ante
Manchester City por 3-2 después de haber ido ganando 2-0 en la primera media
hora de juego.
Después de una muy mala segunda rueda en la pasada Premier
League, en la que el equipo se salvó del descenso más por las pobres campañas
de sus rivales que por méritos propios, Brighton & Hove Albion decidió no
renovarle el contrato a su histórico entrenador Chris Hughton. El elegido para
reemplazarlo era Potter, pero Swansea no haría las negociaciones fáciles. Las
dos primeras ofertas fueron rechazadas, aunque el director técnico le manifestó
a la dirigencia del club galés su deseo de irse a la máxima división. Swansea
le ofreció ser el mejor pago de la Championship, pero finalmente BHA pagó 3
millones de libras compensatorias y a fines de mayo se llevó a Graham Potter
con todo su cuerpo técnico.
El objetivo de las Gaviotas esta temporada será salvarse del
descenso con comodidad y tener una impronta de juego propia. Para eso
contrataron a un técnico joven -44 años- que consiguió una buena reputación haciéndose
desde bien abajo. Sus equipos juegan con una formación 3-5-2 en la que los
jugadores pueden rotar constantemente de posición. Potter sostiene que la
tenencia del balón es fundamental en este juego y cita a Josep Guardiola y
Roberto Martínez como sus referentes.
El belga Leandro Trossard, recién llegado desde Genk, será
muy importante en su esquema. El futbolista diestro, que se siente cómodo
partiendo desde la izquierda, es probable que en este Brighton juegue de
mediapunta cerca del centrodelantero, que podría ser el francoargentino Neal
Maupay (otro refuerzo), el rumano Florin Andone o el experimentado goleador
Glenn Murray. La pasada temporada, lo mejor que tuvieron las Gaviotas fueron
sus centrales Shane Duffy y Lewis Dunk, quien se quedó a pesar del interés de
Leicester City. Para formar la línea de tres que habitualmente emplea Potter, a
ellos se les sumó Adam Webster, quien dejó Bristol City por 22 millones de
libras para transformarse en la compra más cara de la historia de los del sudeste
inglés.
Como jugador, Potter fue un lateral izquierdo que pasó por
diversos clubes del ascenso inglés y que llegó a jugar ocho partidos de la
Premier League 1996/1997 en Southampton. Se retiró en 2005 para graduarse en
Ciencias Sociales en la Open University. Dos años después, viajó al Mundial
femenino como director de equipo (nexo entre el cuerpo técnico y los
directivos) de Ghana, y al regresar a las islas entrenó a algunos clubes
universitarios. En su tiempo en la “Leeds Metropolitan University”, completó
una maestría en liderazgo y manejo de grupos.
Su amigo Graeme Jones, quien fuera parte del cuerpo técnico
de Roberto Martínez, lo recomendó a Östersunds y allí arrancó su carrera en
clubes. A diferencia de Harry, este Potter no tiene nada que ver con la magia.
Trabajó para lograr que un equipo de cuarta división escalara hasta jugar
competencias europeas y ahora está ante una gran oportunidad: dirigir a un
equipo de Premier League.
Respetado en el ambiente
Para un entrenador joven que no tuvo una carrera reconocida
como jugador, suele ser difícil encontrar la aceptación entre sus colegas de
mayor experiencia. Pero Graham Potter se hizo un nombre rápidamente y recibió
críticas positivas por parte de directores técnicos de renombre. Por ejemplo,
antes de un partido entre Swansea y Leeds de la temporada pasada, Marcelo
Bielsa manifestó: “Me gusta el estilo de Potter. Forma parte de una nueva
generación de entrenadores ingleses que priorizan que el arquero y sus
defensores muevan la pelota desde el fondo de la cancha. Trajo nuevas ideas a
esta liga”. Alan Curtis, otro exentrenador del equipo galés, lamentó su partida
a mitad de este año: “Le deseo lo mejor, pero me hubiese gustado que Graham se
quedara. Con él, teníamos todo para regresar a la Premier League”. En su paso
por Suecia, el ex delantero de Celtic, Barcelona y Manchester United Henrik
Larsson elogió su capacidad de manejar grupos y lo felicitó por cómo le cumplen
sus jugadores
Fuente: http://www.culturaredonda.com.ar/la-gran-oportunidad-de-graham-potter/
Autor: Oscar Mendez.